viernes, octubre 06, 2006

Sabores, encuentros y sensaciones...

Es tarde, los ruidos de la cocina son intensos, las ollas suenan sin piedad, los piés se ponen un poco hinchados de tanto estar parado y caminar sin cesar, desde las ocho de la mañana, entre los mesones de acero, recogiendo los olores de las preparaciones, los colores de los ingredientes frescos, los sabores de la magia realizada en los fogones...
Es tarde, ya los estudiantes estan terminando el día, ya terminaron de comer sus platos y comienza la tarea de limpiar...
Es tarde cuando suena el teléfono y se reconoce la voz del amigo hermano desde el sur, desde el antiguo sur chileno, desde el sur de dalcas y sonrisas francas, desde el sur de Nail y su prole, desde el sur de erizos, piures, choros, curantos, chicha de manzana, ajos y salvia, desde el sur lleno de lanas de colores, entretejidos por manos morenas...
Llego mañana, me quedo en tu casa... y después me acompañas. (bueno)
Un queso camembert, un buen vino tinto de guarda, un salmón ahumado del sur, de esos que se ahuman con maderas nativas de verdad y no con esencia de humo comprada en el supermercado. Un salsa ligera para acompañar estos sabores fuertes, una salsa como para que la haga Roxi para acompañar sus vegetales (te debo una receta vegetariana); yogurt natural, sal, pimienta recién molida, eneldo, limón y aceite de oliva. Mezclar bien y lista una salsa ligera para acompañar estos sabores.
Tenía que decirlo, la comida fue el preambulo de las palabras y las risas que nos acompañaron, fue extraño tambien volver a un espacio antiguo y nuevo a la vez, volver a escuchar las palabras nuevas y viejas dichas y no dichas en las miradas o las voces. Escuchamos los textos del humano de la casa y nos sentimos orgullosos (hasta yo me sentí orgulloso, solo por conocer al niño que cuenta historias), y otra vez nos reímos.
Tarde, volvimos a mi casa, nos sentamos a oscuras y casi no hablamos. Mi amigo partió hoy de regreso al sur. Aquí nos quedamos llenos de sabores, encuentros y sensaciones.
Un abrazo